La propiedad en distress se refiere a bienes raíces que enfrentan dificultades financieras, lo que puede incluir ejecuciones hipotecarias o ventas forzadas, y que pueden ofrecer oportunidades de inversión a precios reducidos.
Encontrar un agente de bienes raíces puede facilitar la compra o venta de propiedades, ya que estos profesionales cuentan con el conocimiento del mercado y pueden guiarte en el proceso.